La cuestión no es rodearse de la tecnología más sofisticada, la esencia está en descubrir, investigar, aprender…para que el conocimiento aumente. Solo así puedes entrar al planeta de INTERNET y absorver de él esencias lúcidas que podrás aplicar con éxito en tu vida personal y social.
De nada vale divisar las puertas sino posees la llave de la lucidez. Para eso debes dedicar tiempo y espacio suficiente a la lectura, nutrirte de una cultura general integral guiada por intelectuales que te induzcan a la misma, personas que ya recorrieron el camino del aprendizaje más profundo.
Por tal razón es que percibimos tantísimos internautas expresando a través de textos, videos o fotos pensamientos mediocres, que solo conducen a la estupidez o el mal gusto. Existen miles, millones de adolescentes, jóvenes y adultos que sin darse cuenta exponen todos los días en las redes sociales, sus escasos discernimientos.
Cuántos sitios, páginas, portales notables coexisten en la red de redes. Eso si, para encontrarlos debes tener el afán de averiguar lo nuevo. Debes saber que existe más de lo que conoces hasta este instante, SIEMPRE MÁS. Todo lo que te inquieta y no comprendes debes preguntárselo al mismo buscador de Google. Rastrearlo en bibliotecas y si es preciso contactar al autor del hecho creativo e interrogarlo.
Lo que procuro es arribar a un equilibrio donde la mayoría demuestre ese talento, razonamiento con el que fueron concebidos. No pretendo, ni exijo que todos los habitantes de la tierra sean eruditos en materias disímiles.
La superestructura cuántica que está en avance, de la cual eres el centro desde este 2020, solo tomará forma trascendente si tú la dominas a ella y no pereces diluido en el laberinto de lo tonto a que puede arrastrarte.
Eso lo hacen los Inteligentes Esenciales (IE) y no los Analfabetos Tecnológicos (AT).
