Manuel Aguado Padrón, trabajador de la Unidad Empresarial de Base VD-9, en Minas de Matahambre, dedica parte de su tiempo libre a cultivar su patio desde hace ocho años, durante el fin de semana.
Boniato, fruta bomba, piña, plátano, yuca, calabaza, ají cachucha y malanga criolla, figuran entre sus principales siembras.
“Ya tengo la tierra preparada para plantar próximamente: tomate, col y habichuela. Estos productos crecen aquí con muy buena vitalidad, verdad que también ayudo a que sea así, pues auxilio mucho a la tierra para que sea cada vez más productiva.
Empleo el intercalo de las plantaciones, así obtengo más con menos, porque no dispongo de tanto espacio.»
En estas labores le colabora su nieto. A él le enseña todos los secretos para que futuramente pueda también cultivar su patio y obtener buena parte del sustento de la familia.
“Ayudo a mi abuelo en todo lo que puedo, riego y siembro el bejuco de boniato, escardo, preparo tierra, quito las hojas secas al plátano y las ubico en su tronco.
Asímismo toda la basura que recogemos la apilamos para después emplearla como fertilizante.Son productos que no tenemos que comprar, los poseemos en el mismo patio.Colaboro con él porque aprendo muchas cosas. Veo el resultado de mi esfuerzo, soy útil y me hace feliz ayudarlo.”
El consejo oportuno de Manuel a las personas que poseen espacio y no lo aprovechan no se hizo esperar:
“Hoy más que nunca hay que sembrar, emplear cada espacio, cada vasija que tengamos para garantizar la alimentación.Cultivar especias y hasta plantas medicinales. Estamos afectados por la Covid-19, el bloqueo que cada día es más intenso, las lluvias asociadas a los ciclones, en fin, cosechar es la mejor alternativa en estos tiempos para el beneficio de todos.»
Manuel y Rubén, forman un dúo perfecto. Uno aprende del otro, saben cuán importante es garantizar la alimentación, máxime en este período donde atravesamos una difícil situación marcada por epidemia, bloqueo y abundantes precipitaciones.