Los recorridos de la dirección de la Asamblea del Poder Popular en Minas de Matahambre, se producen cada semana. Los consejos populares del territorio reciben a su presidenta Miriam Martínez Veloz, quien no cesa en fiscalizar el accionar de los delegados.
Es por ello que el funcionamiento de la Asamblea en este sentido es coherente y marca pautas a nivel provincial. Para Martínez Veloz es decisivo el diálogo oportuno con los delegados, en aras de conocer el desempeño del Comité de Vigilancia contra la COVID-19.
Muestra interés por saber la percepción de riesgo que existe en cada demarcación para enfrentar la pandemia con éxito. Pregunta por la labor de pesquisaje que realizan en cada zona y la eficiencia de la misma.
También visita a los policlínicos, centros laborales y barrios vulnerables al contagio, constata el cumplimiento de las normas higiénico- sanitarias en cada uno de ellos.
Así mismo valora con cada uno de los delegados, las respuestas que ofrecen a los planteamientos de los electores. Este asunto es central en el contexto actual, donde existen tantas carencias materiales para solucionar las problemáticas. Aun así con la participación popular, múltiples retos son vencidos cada jornada. En la unidad está el poder.
No falta en los recorridos, la fiscalización de las labores en el contexto productivo, el análisis del cumplimiento de los planes previstos en la campaña tabacalera, la siembra de patios, huertos y organopónicos para el logro de rendimientos ostensibles de hortalizas.
El vínculo de la Presidenta con sus delegados, garantiza el conocimiento de los avances y deficiencias reales.