
A unos 500 metros del policlínico Enrique Camalleri Mena fuera de la zona residencial del Consejo popular La Sabana al norte de Minas de Matahambre una estructura agrícola promete grandes beneficios a la alimentación de los pobladores de la comunidad.
Es el organopónico La Sabana, un centro de nueva creación, en reposición de otro, demolido para construcción de viviendas.
La instalación inaugurada el 30 de enero pasado ya cuenta con producciones destinadas para la venta a la población.
Sus primeros frutos obtenidos durante los últimos dos meses estuvieron destinadas a los centros de aislamiento para combatir la Covid-19.
De igual forma fueron dirigidos al consumo de los trabajadores del cercano policlínico, así como al Sistema de Atención a la Familia.
Armando Rivero Rivero, jefe de la unidad productiva explicó que el trabajo es arduo para lograr mantener los espacios a plena capacidad de siembra.
De los 28 canteros existentes están sembrados 27; el otro lo vamos cultivar de zanahoria, ya tenemos las semillas. Tenemos para la venta a la población, directa desde el cantero: lechugas, tomates y rábanos
Las pequeñas parcelas adyacentes a las áreas de los canteros también las aprovechan pues allí ningún espacio puede quedar ocioso comentó.
En las parcelas tenemos rábanos, sábila y piña, vamos a incrementar y a diversificar más estos cultivos
Rivero Rivero asegura que allí no quedará, ni un sólo espacio ocioso.
Con sólo un colectivo de cuatro trabajadores pretenden obtener altas producciones que si bien no abastecerán la demanda de la comunidad, sí aportarán cifras significativas de los productos.
En cuanto al salario a partir del ordenamiento monetario en Cuba, es de dos mil 540 pesos, además del 40 por ciento de las utilidades por las ventas.
Quizás no sea un gran salario, pero estamos contentos
A la par del trabajo agrícola allí laboran también en varias construcciones como parte de la instalación que aún están sin concluir.