Por: Pedro Abreu Mujica
Reinaldo Montesinos fue uno de los talentos pinareños que, en su niñez, años cincuenta del siglo pasado, descolló en La Escuelita del Aire. Luego, en la adolescencia participó del programa de aficionados y otros espacios para la juventud de la emisora CMAB. En 1962 vino a estudiar becado pará La Habana y en esta ciudad inició una carrera en el sector artístico que lo convertiría, en poco tiempo, en una figura nacional: guitarrista, compositor y director de la orquesta del ICRT.
Montesinos (1) recuerda con gratitud al creador y primer director del programa, Pedro Calleja Rivera: «Callejita me puso a cantar y a tocar ante el micrófono y el público presente en el estudio teatro. También en Pinar del Río participe en otros programas de la CMAB y Radio W. Hasta me enseñaron a escribir guiones y cogí una experiencia muy buena. Doy gracias a aquel programa, en particular a Callejita, ya que lo que allí aprendí me sirvió para, ya en La Habana, desarrollar mi carrera como profesional.
Obligada mención merece Pedro Calleja Rivera (2), uno de los nombres imprescindibles en la historia de la cultura pinareña y en particular de la radio. En la década del veinte formó parte de un grupo de aficionados al teatro. En 1962 fue editor del semanario cultural “Guamá” (3). Concibió numerosos programas, era guionista, publicista, redactor periodístico, productor, vendedor de anuncios, etc. Lo único que no le vi hacer en los años que lo conocí, fue hablar por radio, pienso que sería por no tener voz radiofónica. Jugaba casi todas bases dentro del equipo y las jugaba bien.
Las emisoras en loa los años 50 tenían, y seguro desde mucho antes, programas dedicados a los niños, pero ninguno hecho por los mismos niños. Contenían canciones grabadas, cuentos y hasta escenificaciones, con la actuación y animación de adultos que hacían el papel de niños. Las excepciones, que yo recuerde, fueron dos: ‘Los muchachos de mi barrio, de corta duración en Radio W, y en la CMAB, «La escuelita del aire». Eran programas protagonizados y hasta con secciones escritas por los propios niños.
Cuando la CMAB se convirtió en CMAB-Voz del INRA, a mediados del año 1960, obviamente mantuvo algunos programas de épocas anteriores, entre ellos, “La escuelita del aire», que se transmitía en vivo y directo, desde el estudio teatro de la emisora, la que se llenaba las mañanas de los domingos, por decenas de niños acompañados de sus padres u otros familiares. Mientras se recreaban, también se educaban en valores y despertaba en ellos el interés y la vocación por el arte y la cultura.
Notas:
- Conversación con el autor.
- Pedro Calleja Rivera simultaneaba el trabajo de «La escuelita del aire», con la dirección de la emisora CMAL Radio Juventud, que después se denominó Radio Revolución. En 1960 el arrendatario la abandonó y los trabajadores comenzaron a autogestionarla, ya que el propietario tampoco tenía interés en asumirla. En junio de 1961 fue nacionalizada. Tenía estudios y oficinas en la calle San Juan entre Martí y Máximo Gómez.
- COLECTIVO DE AUTORES, “Síntesis histórica provincial de Pinar del Río”, Editora Historia, 2012, pág.226
(Continuará)