Cada 29 de mayo, los tabacaleros cubanos rinden tributo de recordación a Lázaro Peña, capitán de la clase obrera, nacido en 1911.
El líder sindical resume una vida entregada por entero a la defensa de los derechos del proletariado. Su vínculo con el movimiento progresista lo lleva a prisión durante el gobierno de Gerardo Marchado, cuya opresión estremeciera la simiente de la nación en la década del treinta del siglo XX.
Su actuar lo convirtió en símbolo de combate y su nombre engrosó la lista de la Federación Sindical Mundial. Tras la clarinada de enero de 1959, Lázaro Peña fue electo secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba para contribuir a la unidad y el prestigio del movimiento obrero cubano.
De origen humilde, Lázaro Peña estuvo vinculado al sector tabacalero de la nación para devenir símbolo de un sector decisivo para la economía nacional.
En estructuras productivas vinculadas al quehacer tabacalero rinden hoy el homenaje respetuoso, no obstante el difícil escenario epidemiológico que vive Cuba. Pinar del Río, en su condición de meca del tabaco, se suma a la celebración.
Teniendo en cuenta los resultados de la pasada campaña, el municipio de San Juan y Martínez reúne a héroes del trabajo y hombres y mujeres destacados del sector. En humildes ceremonias los tabacaleros evocan el ejemplo del hombre que llegara a alcanzar el grado de Capitán de la clase obrera de Cuba.
