Cada tarde, después de regresar de su centro laboral, Luis Cabrera Santana radicado en el Consejo Popular Minas, atiende con esmero los cultivos plantados en su huerto, un tiempo que aprovecha para eliminar las malas hierbas, regar la plantas y aporcarlas.
«Este terreno costó muchísimo esfuerzo mejorarlo. Esto era un pedragal, un monte. El trabajo que desarrollé al principio fue inmenso, pero no hay tarea que el hombre se proponga y no la logre.
Lo primero que hice fue desmontar todos los arbustos y ramajes innecesarios que habían. Tuve que retirar escombros del lugar. Con el pico emparejé la tierra, traté de nivelarla. Trasladé más 30 vagones de capa vegetal, cernir la tierra, hacer los canteros.
Ahora tengo bastante habichuela sembrada, tomates, pepinos. Aprovecho mucho este tiempo de lluvia. Las plantas crecen con una fuerza increíble.
Este año realicé una cosecha tremenda de tomates, unos los regalé a los vecinos, otros los vendí a precios asequibles sin abusar con los compradores. Los tomates fueron hermosos y de diferentes variedades. También logré acelga, lechuga, ajíes, zanahorias.
Ahora estoy chapeando otra área grade para sembrarla de plátanos, piña, aguacate. No me detengo. Creo que todo minero que tenga un patio o solar debe labrarlo, tratar de obtener alimentos para el sustento de la familia y el pueblo.»
Luis Cabrera Santana, productor de Minas de Matahambre.
El joven productor Luis Cabrera Santana, reconoce en la tierra una oportunidad para producir alimentos y contribuir con el autoabastecimiento del municipio.
