Una vez más la tierra palestina, ocupada y pisoteada por Israel, es bañada con sangre inocente.
Al menos 28 palestinos, incluidos diez niños, han perdido la vida y más de 150 resultaron heridos mientras los aviones de combate israelíes continuaron atacando la Franja de Gaza en el segundo día de brutal agresión.
En su cuenta de Twitter, el canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla condenó enérgicamente los bombardeos indiscriminados y denunció el apoyo permanente de Estados Unidos a esos crímenes.
Se conoció que, por las incursiones militares en Al-Quds (Jerusalén) y en toda la Cisjordania ocupada, unos 700 palestinos han resultado heridos en las últimas 24 horas, según Hispantv.
Los palestinos, en su defensa, han lanzado cientos de cohetes sobre la zona de Jerusalén, mientras exigen la retirada de los militares de esa urbe sagrada.
La agencia efe informó que la Ciudad Santa vive la jornada más tensa en años, con un saldo de al menos 300 palestinos y 16 policías israelíes heridos.
El Gobierno de Estados Unidos, aliado de Israel, se pronunció este martes, no para condenar la masacre contra civiles palestinos, sino para cuestionar el lanzamiento por estos de los cohetes hacia el territorio ocupado. «ee. uu. condena en los términos más enérgicos el aluvión de ataques con cohetes, disparados contra Israel en las últimas horas. Esta es una escalada inaceptable», afirmó en una rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
A su vez, el vocero puntualizó que su Gobierno reconoce el derecho de Israel a defenderse.
Mientras tanto, el ministro israelí de Asuntos Militares, Benny Gantz, ha ordenado más ataques aéreos contra la Franja de Gaza y la movilización de unos 5 000 soldados de la reserva para la represión contra los palestinos.
