El Buró Federal de Investigaciones (FBI) registró la residencia de Donald Trump, Mar-a-Lago en Florida, según declaró el ex presidente de Estados Unidos en un comunicado.
Se trata de un suceso sin precedente en la historia de la nación norteña.
Varios medios de comunicación estadounidenses aseveran que el hecho puede estar relacionado con el destino de hasta 15 cajas con documentos.
Según la cadena CNN, pudo haber un mal manejo de documentos presidenciales, algunos clasificados, que podrían haber sido llevados por Trump a su casa, tema de una de las dos investigaciones del Departamento de Justicia en las que está involucrado.
Durante su período presidencial, Trump fue llevado a juicio político en dos oportunidades, incitó al ataque al Capitolio para tratar de anular su derrota en las elecciones de 2020 y rompió muchos de los límites de su cargo.
Como hábil político, el ex mandatario, dio un giro al hecho y alegó que su «hermosa casa» estaba «sitiada, asaltada y ocupada» mientras se quejaba de que él era víctima de la «utilización del sistema de justicia como arma» por parte de los demócratas que querían impedir supuestamente que se convirtiera en presidente después de las elecciones de 2024.
El FBI y el Departamento de Justicia se negaron a comentar sobre el registro. Por su parte, el presidente Joe Biden no estaba al tanto del allanamiento de Mar-a-Lago hasta que se informó en las noticias, según expresó un alto funcionario de la administración. También el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, quien aspira a convertirse en presidente de ese órgano, prometió investigar al secretario de Justicia Merrick Garland si los republicanos ganan en las elecciones intermedias de noviembre.