Después de una trayectoria exitosa en la Unión de Jóvenes Comunistas, Reinaldo Ramos Padrón, residente en el consejo popular La Sabana, al norte de Minas de Matahambre, recibió en 1990 el carné que desde entonces lo acredita como militante del Partido Comunista de Cuba.
Nunca imaginó que alguna vez participaría en un congreso de la organización política por lo que fue grande su sorpresa cuando en 1997 fue seleccionado delegado directo al Quinto Congreso.
Me desempeñaba entonces como fundidor de oro,en el proyecto Oro Castellanos.
Tuvimos la oportunidad de tener un delegado directo al congreso y fui propuesto por mis compañeros para representarlos en el importante evento.
Fue un gran orgullo para mí,máxime cuando había otros compañeros que también merecían ocupar aquel lugar.
El congreso como tal fue una gran experiencia. Allí tuve la oportunidad de vivir días de unidad con el resto de los delegados.
Creo que como todo delegado a un congreso del Partido una de las cosas que más me impresionó fue encontrarme,tan cerca de los dirigentes de la Revolución de los cuales,tan solo había visto por televisión.
Sobre todo pensaba en que vería a Fidel personalmente y fue así; aunque sólo lo tuve a unos pasos de mí, al comienzo de una de las sesiones,sentí gran emoción.
Fue un momento que nunca olvidaré. En aquel entonces Cuba vivía un período especial crudo, a unos años de la caída del campo socialista en Europa del Este, pero aún así, Fidel nos alentaba a seguir adelante nos exhortaba a ser más exigentes con nosotros mismos para llevar adelante la Revolución bajo cualquier circunstancia.
Hablaba de una manera que no dejaba lugar a dudas. Al salir de allí, todos estábamos convencidos de que teníamos una gran responsabilidad y era no sólo ser fieles a aquella confianza que él puso en nosotros, sino en transmitirle esa misma confianza a nuestros compañeros y trabajar juntos para mantener la Revolución a toda costa.
Al regreso a mi trabajo y mi organización de base compartí mis experiencias con mis compañeros quienes también se sintieron emocionados con mis relatos, a pesar de que habían seguido el congreso por televisión. Entonces todos estábamos seguros de que la Revolución esperaba por nosotros
Ramos Padrón ha cumplido siempre sus tareas como militante y fue secretario del núcleo del año 1998 al 2000, mientras trabajaba en el proyecto Cobre- Mantua.
Hoy milita en el núcleo de transporte de la Unidad Empresarial de Base Aseguramiento, de la empresa Geominera Pinar del Río donde por estos día recibió un reconocimiento por su participación en el Quinto Congreso del PCC.
